Por Juan García Vicente
Ecologista Madrid
7/12/2020
El rebaño ha dormido a poco metros de la estación de tren de El Goloso. Noche fría dentro de las 35 vallas metálicas o teleras que les sirven de protección y jaula a la vez. Los mastines han hecho guardia como les corresponde y asumen. Para un profano no deja de sorprender el mimetismo que tienen mastines y ovejas. A veces es difícil distinguir los mastines en el mar de ovejas, son una más y su convivencia es admirable, muy distinta es la reacción de los perros carea con las ovejas y estas distinguen bien unos de otros.
EL GOLOSO.
Conocido enclave militar camino de Colmenar Viejo y la Sierra Norte de Madrid. La autovía se aproxima a la líneas de ferrocarril convencional y del AVE . El pasillo verde que se ha recorrido desde Tres Cantos se hace más estrecho y el terreno libre de infraestructuras viarias y sus zonas de servidumbre es ocupado por una colonia de casas unifamiliares relacionadas con la instalación militar. Son del estilo de las viviendas existentes en otras zonas similares como las que encontramos en el entorno de Campamento y Colonia Jardín. Suponemos que han perdido su titularidad pública y han sido vendidas por el INVIFAS , entidad pública que gestiona las viviendas de Defensa.La línea del AVE ha ampliado enormemente el moderado espacio que ocupaba la línea de tren convencional. El AVE «exige» pasillos de servicio paralelos a ambos lados de sus vías , lo que supone un enorme mordisco al territorio en todo su trazado y un evidente gasto añadido en alambradas, protección, materiales para habilitar los pasillos paralelos de servicios,..etc etc. Mientras que el tren convencional no requiere el despilfarro de recursos materiales y financieros como el AVE. Su velocidad se paga en externalidades como se dice finamente.
El rebaño ha tenido que habituarse en las horas de encierre al estruendo del paso de los trenes, lógicamente peor para sus oídos el estruendo de los AVES. Están deseando salir del redil a soltar piernas, perdón patas, y llenar el estómago.
Como han venido a grabar con un dron sus movimientos, las ovejas se extrañan ante este objeto volante que se coloca por encima de sus cabezas, son muy sensibles tanto al ruido como a la forma del OVNI que no asocian con ningún ave conocida.
Antes de empezar la ruta las ovejas realizan un paseo por la zona donde encuentran gran cantidad de bellotas que les lleva en carrera de encina en encina. La abundante hierba de este bonancible otoño parece que les sirve de complemento.


VERTIDOS DE TODO TIPO
Esta zona de El Goloso tampoco escapa a la desgraciada práctica de vertidos de todo tipo de residuos sólidos urbanos aún estando en las proximidades de zona militar. No escapa nadie de esta epidemia que emponzoña tantos las áreas periurbanas de las ciudades, grandes y menos grandes. Las ovejas sortean tanto los vertidos de escombros como restos de podas , neumáticos de vehículos de todo tamaño. Cerca de allí no hay población civil, lo que nos lleva a deducir de donde provienen, en su mayor parte, todos estos vertidos.
La gestión de control de vertidos y residuos es un problema que va más allá de la simple multa y del estrecho marco de cada municipio.

CAMINO DE VALDELATAS Y FIN DE LA TAPIA DE EL PARDO
El largo puente y la pandemia hace que la presencia de urbanitas sea más numerosa que en ocasiones similares, el puente ha hecho que mucho personal haya cambiado su destino de puente a Londres o Estambul, por un garbeo en la bici todo terreno por estos lares más cercanos . El rebaño ha de compartir y competir con ciclistas en los badenes de la ruta hasta Valdelatas, nombre de lo que fué una estación de tren, ahora desafectada por desmantelamiento de la vía de tren que pasaba por allí hasta hace unos pocos años.

En la estrecha franja de terreno entre la tapia de El Pardo y la vía de tren nos encontramos con especies arbóreas poco corrientes: decenas de alcornoques y coscojas, aparte de las abundantes encinas.

Parece que hubieran saltado la larga tapia que rodea el Monte de El Pardo. Abajo ha quedado la enorme trinchera por donde pasaron los trenes, ahora sin oficio ni beneficio como muchas otras líneas ferroviarias en este país. Aquello pide a gritos una solución de reposición del terreno para evitar daños mayores debido al creciente tránsito de ciclistas y marchadores.

Las caídas de los taludes pueden llegar a los 20 metros. Tanto ADIF como Patrimonio Nacional tienen aquí una tarea pendiente. Quizás no tengan ni idea de este serio problema.

GIRO HACIA EL OESTE SIGUIENDO LA TAPIA DE EL PARDO. A LA PORTILLERA DEL TAMBOR
En este punto confluyen el Camino de Santiago, desde Madrid, que viene desde Fuencarral y la Senda Real / GR 124 que viene desde el Oeste, desde la Portillera del Tambor.

Fin de la etapa de hoy para el rebaño. Entramos en una amplia zona despejada de vegetación salvo la que surge en las vaguadas de este recorrido donde es más propicio su crecimiento. Dejamos al lado oeste de la ruta el complejo hospitalario conocido como clínica SEAR, pero está al otro lado de la vía citada. A este lado nos topamos con instalaciones agropecuarias o similares: picaderos, granjas y cercados que denotan la presencia de ovejas. Hay que tratar de evitar la coincidencia con otro rebaño, es la preocupación de los pastores: Dani, Alvarín y Mario y la pastora Vicky.


El cruce con otro rebaño supone un serio contratiempo, aunque la oveja rubia de El Molar se distingue claramente por sus señas de identidad inconfundibles. Los grupos de ciclistas en la mañana dominguera siguen apareciendo por la ruta hacia la Portillera del Tambor. Estamos aún en terrenos del Parque Regional de la Cuenca Alta del Manzanares para sorpresa de las gentes.


FINCA LA MUÑOZA. FIESTORROS EN PARQUE REGIONAL Y TAMBIÉN VERTIDOS DE OBRAS
Esto no impide que, entre otros asuntos, este territorio ha sido escenario de denuncias y hechos asociados de diversa índole en la que el ecologismo ha sido y es parte interesada y afectada. Cerca de donde pernoctan las ovejas se sitúa la finca La Muñoza que ha sido denunciada por razones de índole legal y ambiental por el ecologismo. Al final nos dan la razón, os dejamos el enlace de la sentencia.
A corta distancia, se produjo el vertido de miles de toneladas de tierras provenientes de los desarrollos urbanísticos de la zona ( Montecarmelo, Sanchinarro, y otros) que han modificado el terreno ondulado con fines no aclarados , realizados, además , en el Parque Regional. Las denuncias legales no surtieron efecto hasta que Ecologistas en Acción se interpuso físicamente en la entrada de los vehículos que realizaban los vertidos, lo que llevó a que la noticia apareciera en los medios de comunicación y el escándalo llevara a la prohibición de seguir con los vertidos.
Como se ve, en esta ruta trashumante nos encontramos con una serie de maltratos al medio natural y personal que nos da idea de como se administra o no el territorio de la Comunidad de Madrid.

ENTRADA EN LA CAPITAL POR LA SENDA REAL / GR 124
El lunes 7, el rebaño entrará, glorioso en el casco urbano de Madrid por la calle Braojos del distrito de Fuencarral para llegar a la Ciudad Universitaria gracias a la existencia de la Senda Real / GR 124 que idearon gentes de Ecologistas en Acción hace ya 20 años . Aparte de las gentes, cientos de personas , que participaron en las marchas reivindicativas, anuales , para disponer de una salida a pie de Madrid hacia El Pardo y la Sierra hubo personas en las Administraciones que contribuyeron a que esta ruta sea ahora una parte imprescindible del Anillo Ciclista de Madrid.
Hay que recordar a Santiago Soria, ahora en el Ayuntamiento de Madrid que arañó unos metros al Real Club de Golf Puerta de Hierro, entonces desde su cargo en Patrimonio Nacional, para dar espacio a esta ruta senderista , ahora más bien ciclista. Asimismo a Antonio Lucio, Director General en la Comunidad de Madrid que díó carta de naturaleza a este GR con la edición del mapa de la Senda Real / GR 124, documento que está a punto de ser declarado incunable por su valor y por su antigüedad de 20 años.
Bienvenido a la capital el rebaño de ovejas raza Rubia de El Molar.!!!!
Gracias a la cooperativa Agroforestal Los Apisquillos, con la colaboración de Campo Adentro-Inland, Amigos de la Tierra y Ecologistas en Acción por organizar la Trashumancia del rebaño desde la sierra Norte de Madrid hasta la Casa de Campo.
Mañana último capítulo de esta gran gesta y de nuestro reportero Juan.
Mesa del Árbol de Carabanchel